Escrito un 15 de febrero del 2017
Amar es un salto de fe al vacío, te sumerges en lo desconocido, confías en lo que sientes; amar es creer ciegamente porque jamás existirá la certeza de que puedes asegurar que lo que siente el otro es lo mismo, sólo confías y te dejas llevar.
Porque todos somos distintos, aunque, si no estás preparado para saltar.
¿A qué te quedas?