Cuando te agarraste a mí no sabía cómo llamarte ya que de repente te disfrazaste de hábito. Yo regresaba a mi casa, picaba algo de comer si no es que terminaba fuera de mí debido a las náuseas, mi falta de apetito, después dormir horas y horas, despertar en medio de la madrugada para terminar … Sigue leyendo Dominga